A medida que crece la preocupación por el medio ambiente y aumentan los problemas de salud relacionados con la alimentación y la nutrición, los gobiernos y sus asociados para el desarrollo se interesan cada vez más por las posibilidades de los huertos escolares.
Los huertos escolares tienen un largo historial. Es la historia de diversos objetivos, prácticas en evolución, compromisos fluctuantes y en la actualidad una importancia renovada.
Las necesidades urgentes están imponiendo un replanteamiento a escala mundial de las posibilidades de los huertos escolares.
Está surgiendo un nuevo modelo de huerto escolar que responde más ampliamente a las necesidades de hoy.
Un aprendizaje eficaz en el huerto supone un enfoque de aprendizaje práctico que une la acción y la comprensión, un elemento sólido de aprendizaje social para llevarlo a la práctica y una dimensión de desarrollo personal y preparación para la vida que permite a los alumnos controlar lo que hacen.
Este modelo cada vez más popular de plan de estudios del ‘ciclo alimentario’ es adecuado para cualquier país, con independencia de su fase de desarrollo.
El éxito depende de la actitud, las motivaciones y la comprensión de la escuela y la comunidad y de su capacidad para sostener la innovación.
Al poner en marcha, reactivar o reorientar los huertos escolares se pueden encontrar problemas conceptuales, prácticos y sociales. Los promotores de los huertos escolares podrán identifi car los propios y añadirlos a la lista que figura a continuación.